miércoles, 14 de octubre de 2009

Por qué no fuimos al mundial.

Es muy fácil decir que no clasificamos porque no le ganamos a Venezuela en la primera fecha en donde debimos haber iniciado bien la eliminatoria. Yo, creo que la cosa venía de más atrás. Creo que desde la Copa América de Venezuela en el 2007.

Ecuador, a mi entender, tenía, entonces, el mejor equipo de la región más competitiva del mundo. Primero. Porque mantenía una base de jugadores consagrados que funcionaban alrededor de una idea táctica trabajada y lúcida. Segundo. Porque atrás de ellos había una amplia masa de jugadores "promesa" que podían continuarla: Benítez, Noboa, Caicedo, zura. Algunos de ellos, se habían consagrado campeones americanos en los juegos Panamericanos de Río de Janeiro. La pronta eliminación de aquella Copa América, en un partido raro contra Chile, ocasionó una ruptura entre jugadores y cuerpo técnico: por eso el inicio de esta eliminatoria fue tan catastrófica.

El equipo que había sido consolidado y que prometía liderar la eliminatoria sudamericana se derribó en un abrir y cerrar de ojos. En parte por el accidental partido contra Chile, que debió terminar con goleada para Ecuador y por el rarísimo 0-1 contra Venezuela en el Olímpico en 2007. Dos partidos visagra, aunque diferentes entre ellos pero con una falencia común: la ausencia de poder en la definición. Desde esos tiempos, ya remotos, del segundo semestre de 2007 la selección ecuatoriana careció de la alegría del fútbol. La ausencia de Delgado y de Kaviedes pesó muchísimo, las promesas, por esa falta de consistencia táctica y estratégica, no brillaron como debían, no estaban respaldadas por una idea de juego que pareció tener fin en la eliminación de la Copa y en las traumáticas derrotas en Asunción y en Río de Janeiro.

Ecuador supo recuperarse, aunque le costaba ganar partidos y sobretodo cerrarlos. el partido contra Uruguay en el Olímpico no fue el único que se nos fue de las manos en el último suspiro. Paraguay y Argentina nos empataron en tiempo de adición. El partido con Argentina fue especialmente doloroso porque se lo planteó de manera audaz y se borró a los gigantes Messi, Aguero y Tévez. Perdimos 7 puntos en cuestión de 10 minutos si sumamos los partidos perdidos en el último minuto. Con los 4 puntos perdidos en Buenos Aires y en Quito ante Paraguay, Ecuador hubiera clasificado segundo hace 2 fechas.

Las pésimas actuaciones arbitrales también conspiraron contra la selección patria, especialmente en los exagerados 4 minutos que el infame de Ruiz adicionó en el Monumental de River y el recordado penal con que Forlán le dio unos preciosos 3 puntos al Uruguay.

Nos hemos quedado afuera por varios motivos, pero solo uno se me viene a la mente. La incapacidad de sostener resultados, que es en muy buena parte, la falta de liderazgo de un técnico inexperto que hizo todo lo que pudo. Nos faltaron 2 puntos que debían sobrarnos.

lunes, 12 de octubre de 2009

A mi no me sorprende.

Obama ganó el premio nobel de la paz. A mi no me sorprendió. Cuando en la víspera de la entrega de los premios vi la lista de quienes lo habían ganado a lo largo de la historia me encontré con nombres como Kissinger, Wilson, Roosevelt, etc. Ahora son 4 los presidentes norteamericanos que han ganado el nobel, pero Estados Unidos ha sido y sigue siendo el mayor productor de armas en el mundo.

Pero los presidentes de los EEUU no son los únicos que logran que la academia sueca ponga en ridículo el concepto "paz." También se han lucido otorgándole el prestigioso premio a organizaciones criminales como la Organización Internacional del Trabajo, que es la que finalmente consigue perpetuar el regimen de esclavitud propuesto desde el imperio.

Vamos a ver que hazañas pacifistas cosiguieron estos personajes para ser honrados con el nobel.

Teodoro Roosevelt fue el primero que habló abiertamente de "intervencionismo" y como un nobel no puede estar hecho solo de palabras, el tipo actuó. Ocupó militarmente República Dominicana en 1904. En 1906 ocupó Cuba y fundó una sucursal de esta retorcida paz que premian los suecos: Guantánamo.
A los suecos también les pareció admirable que Roosevelt haya pensado que a los pasíses latinoamericanos les encanta ser invadidos. De modo que decidió el bracito panameño de Bolívar, deje de ser colombiana para pasar a pertenecer a los Estados Unidos. Tuvo la bondad de construirle un canal que no podía usar hasta que cumpla los 100.

Woodrow Wilson, al notar el éxito de su ancestro Roosevelt, siguió su ejemplo y siguio invadiendo América Latina. A los suecos les encanta esa tradición y la premian. Pero también generó los famosos 14 puntos de la Liga de las Naciones, que hablaba entre otras cosas de promover la paz a través de la guerra. Encima les dejó el guagua y se fue. Estado Unidos, no fue miembro de la Liga de las Naciones.

Kissinger, no solo dice que la guerra es una condición natural del individuo y de los estados, sino que planeó la guerra de Vietnam. Eso sí, hay que aceptar que aportó a los tratados de paz en la zona, después de 2 millones de víctimas. Kissinger también estuvo implicado en el golpe militar argentino y chileno, además de cerradas relacines con esos dictaores. Por su profunda aporte ciencífico, su performance pacifista como cabeza de la política exterior estadounidense y su relación con angelitos enviados del cielo; también recibió el nobel.

Luego está Carter, quien invitó nada más y nada menos que a otro santo para negociar con los panameños la devolución del canal al país que se había inventado su antecesor Teodoro Roosevelt; Augusto Pinochet.

Ahora, los suecos pensaron que nunca el galardón más famoso del mundo (después de los MTV Awards y Miss Universo) podía estar en mejor lugar que en la sala del presidente de un país que sostiene guerras en 3 países diferentes sin señales serias de cambiar de actitud. Es cierto que Obama tiene qe luchar contra un legado nefasto, el de otro seguro candidato al premio obel, George W. Bush; sin embargo es también cierto que no se han hecho avances para solucionar el grado de violencia desatado en Medio Oriente. El gobierno de los Estados Unidos, no está consciente que su mera presncia es detonante de la violencia. No se da cuenta que en a menos de 100 kilómettros de su territorio nacional mueren 15 personas por la violencia desatada por el narcotráfico del cual EEUU es el principal responsable.

Pero Obama no tiene la culpa de ser el ejemplo de paz del año. Es todo un sistema, y por supuesto la academia sueca es parte de aquel que ha subvertido la idea de paz. Esta retorcida paz que nos entregan, a través de la pornográfica competencia por galardones, tiene más que ver con una voluntad de amoldar un criterio de paz que esté en armonía con los intereses y ambiciones de los verdugos de los pueblos. La cosa es muy grave, porque a mi me hace pensar que se nos está distrayendo, que la figura de Obama sigue cumpliendo una funcion de circo. Recordemos la algarbía de los norteamericanos por haber elegido al primer presidente de raza negra. Ahora con el nobel. No vaya a ser que nos monten algún espectáculo un poquito más grave para seguir distrayendo a la gente. Como dicen los mexicanos.
A mi que no me vengan a chingar.

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Pelicula del Socialismo del siglo XXI por Oliver Stone

El director estadounidense Oliver Stone vuelve a mostrar América Latina a través de su particular ojo con un documental sobre la figura de Hugo Chávez y otros presidentes de la región.
Oliver Stone

Stone ya hizo dos filmes sobre Fidel Castro y uno sobre George W. Bush.

"Al sur de la frontera" muestra el surgimiento de la nueva izquierda latinoamericana y será presentada este miércoles fuera de concurso en la célebre Mostra de cine de Venecia, que se extenderá hasta el 12 de septiembre.

Muchos prevén que el documental genere revuelo por mostrar una imagen demasiado positiva del mandatario venezolano y, según temen sus detractores, ocultar su lado negativo.

El director de 62 años, ganador de tres premios Oscar, ha manifestado su apoyo a Chávez y ha dicho que el mandatario venezolano "no es el enemigo público número uno".

"Creo que es un personaje extremadamente dinámico y carismático" dijo Stone al diario Los Angeles Times. "Pero cuando regreso a EE.UU. escucho historias terribles sobre el ‘dictador’, el ‘malo’, la ‘amenaza a la sociedad estadounidense’".

"Creo que el proyecto comenzó siendo una respuesta a la demonización que hacen los medios de EE.UU. de los líderes latinoamericanos", agregó el director.

El filme continúa la saga de documentales biográficos que ha realizado Stone: "W", sobre George W. Bush, y dos documentales sobre Fidel Castro: "Comandante" y "Looking for Fidel".

Varios críticos aseguraron que "Looking for Fidel" fue una respuesta un poco más objetiva a "Comandante", que fue calificada por muchos como una entrevista demasiado permisiva con Fidel Castro.
Líderes latinos

La película que estrena Stone en el festival de Venecia incluye escenas en la casa familiar donde Chávez pasó su infancia y entrevistas en las que el venezolano analiza temas internacionales y petroleros, el socialismo y el pensamiento de Simón Bolívar.

Stone, que estuvo en Venezuela en diciembre de 2007 para preparar el documental, también visitó a otros presidentes sudamericanos.
Lula, Correa, Fernández, Morales

Lula, Correa, Fernández y Morales también aparecen en el documental.

Se lo podrá ver en la pantalla abrazando a Chávez, mascando hojas de coca con el presidente boliviano, Evo Morales, y preguntándole a la mandataria argentina Cristina Fernández de Kirchner cuántos pares de zapatos tiene.

También aparecen entrevistados el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, el ecuatoriano Rafael Correa, el cubano Raúl Castro y el paraguayo Fernando Lugo.

El festival de Venecia ofrecerá la plataforma a la crítica sobre la mirada de Stone. La gran pregunta es si tal y como pasó con "Comandante", el director estadounidense tendrá que hacer una segunda parte de su visión de Chávez y la revolución bolivariana.

miércoles, 26 de agosto de 2009

Atame. Una película brutal.




1.
Una segunda lectura de Átame, la escandalosa película de Pedro Almodóvar, nos indica hasta dónde puede llegar una obra maestra. Cómo cualquier Almodóvar, Átame pone a contraluz la condición humana. Lo hace poniéndola en ridículo, desnudándola y haciéndole una autopsia mientras agoniza todavía. En este caso en concreto Almodóvar a llevado al absurdo hacia un estado de gracia, a una cúspide que es precisamente donde está a punto de terminar la película (entonces Enrique que había soñado todas las noches con Marina no tuvo más remedio que volver a su pueblo natal, ahora en ruinas. De allí solo recuerda a sus padres y de ellos solo su reflejo en el espejo mientras su madre afeitaba a su padre. De ese pueblo no le queda más que una fotografía tomada en la puerta de su casa a la que se enfrenta después de veinte años. No había regresado allí desde que sus padres murieron. La puerta se ha caído y el agujero se agranda más todavía porque le falta Marina. Parece Comala. O Media Luna. O cualquier pueblo del que Rulfo nos contó alguna vez, salvo que allí tampoco habían fantasmas. No era un pueblo fantasma al que Enrique regresó. No daba miedo volver y no encotrarse con nadie. Eso ya lo sabía de antemano, por eso dolía tanto Marina. De modo que subió a la cúspide de lo que parecía ser una antigua iglesia, derrotada por años de viento y de silencio, a mirar lo que hubiera mirado con ella.) pero no termina. Almodóvar nos sigue obligando a sumergirnos en sus personajes, nos da licencia para buscarles lunares en la entrepierna. No es que estos sean especialmente transparentes. Al contrario. Buscar dentro de ellos duele y duele tanto que optas por reír.
Atame nunca provoca nada, no provoca sensaciones. Las inventa.

2.
La historia se trata de un secuestro. Mejor dicho, se trata de un tipo que secuestra a una mujer solo porque está enamorado de ella. Eso es lo que importa. Lo que me importa a mi por lo menos, que anduve persiguiendo esta trama para conseguirla en un cuento, que creo que pocos leyeron, pero de cual, después de esto, pienso poco o mal; es plantear unos problemillas personales alrededor de mi segunda experiencia con esta brutal película.

Problema No. 1
Tengo unas ganas inmensas de decir que lo escribí mucho antes de haber visto la película. Aunque el Alvaro Aleman me advirtió de su existencia yo me resistí a verla por miedo a quitarle originalidad a mi proyección personal sobre el secuestro.

Posible Solución al Problema No. 1
La originalidad no existe. O como dice Benigni en otra película (El Tigre y la Nieve) "es lo más viejo que existe."
Segundo, mi cuento no es de un secuestro.

Problema No. 2
Temo mucho que la película (y mi pésimo eco en forma de cuento) me hayan impactado tanto por una razón personal que pretendo conocida.

Posible Solución al Problema No. 2
Sí, hay que temer esto, pero esto no le quita la genialidad a la película.

3.
Es altísimamente recomendable ver esta película acompañado de algo que sujetarse y de preferencia solo. No es la película que le quieres mostrar a la persona que te guste. Quizá vaya a sospechar de ti en caso que te queden ganas de secuestrarle (lo cual es muy probable) y esto no es una jugada inteligente. A mi, sencillamente me noqueó. El noqueo (que se produjo en todos los rounds, aunque es un noqueo que te inspira seguir levantándote para otra golpiza) no ocurre por la originalidad refrescante con que trata el tema del secuestro porque sencillamente la película no busca reivindicar el secuestro, lo legaliza. Y aún así pienso que en una segunda experiencia con Átame (sobretodo en una segunda lectura) hay que entrarle con cuidado pensando en que los personajes, como en cualquier obra maestra, nos hablan a nosotros de nosotros. Se entiende? Y al hablarnos de nosotros, nos burlan, nos torean y nos humillan. Para que no nos duela tanto el galletazo, Almodóvar tiñe de sarcasmo los diálogos, aunque acabo de pensar que es para hacer exactamente lo mismo.

4.
Vean Átame. Veanla dos veces, yo estoy por recomendar más la segunda vez que cualquier otra cosa. Veanla y por FAAVOR que alguien con mejor ojo que yo haga un comentario en el blog más decentón. Yo me siento simplemente, cogido por un toro.

Alguien póngale título. Cuento.

Esta noche te llevaré una rosa, le sacaré las hojas que han ido perdiendo cierto verdes necesarios. Le extirparé las espinas. La niña que me vende la rosa sabe que voy a tu casa. Es gentil la tardecita, hay una dulce desesperación que se apodera de mi mano. Te llevo una flor aunque pareciera que tengo en la mano una granada. Algo que dijiste en el teléfono desciende sobre la vorágine de los automóviles. En secreto propusiste dulcísimas obscenidades, como si temieras que dios nos escuchara. De mi casa me fui lavando con mis mejores perfumes, de las calles traté de robarme la historia del mundo para contártelo cuando banderees un pañuelo blanco en señal de derrota. A esta hora el tráfico se amontona en angustias y en cansancios. Pero el semáforo también fabrica contraseñas. Que siga me dice y yo, cada vez más cerca de tocar el timbre de tu puerta para apoderarme del silencio a su interior. Pobrecita la gente, anda equivocada sin tu pelo, diría Juan. Tu pelo será el acertijo que trataré de descubrir más adelante. Tu pelo recogido en misterios con una bincha. Cruzar la calle es casi como ir resolviendo un secreto que no se ha roto desde hace siglos. Es mentira absolutamente todo, excepto el camino que finalmente me arrojará a tus brazos. Tus brazos. Un olor que aletea desde tu memoria más reciente insinúa mis soplidos erizando los vellos de tus brazos. Será lo primero que haga. Después te besaré como nunca. Nunca que en estos casos es el complaciente destino del siempre. Casi tropiezo con la vereda, no me avergüenzo. La torpeza de un cuerpo enamorado es el mayor honor al que podemos humildemente aspirar. ¿Habré tropezado contra un pedazo de ciudad, o contra vos? Esas trampas son una delicia en las que estoy dispuesto a caer indefinidamente. La boca anda caprichosa y por eso debo morderme los labios, es preciso entrenar a estos dientes que irán mordiendo tus endebles protuberancias. No me mirarás entonces. Solo me acariciarás la cabeza como a un perro desahuciado y luego masajearás mis orejas. Pero no me acelero, es igual de importante imaginar quién serás tú esta tardecita que anda pidiéndole dos minutos más de vida al sol. Imagino que la tarde se te habrá metido en las axilas y entre las piernas y en todas las esquinas a donde, dentro de poco, iré a cometer dulces fechorías. Cómo estarás vestida. Cuando me pidas permiso para ir al baño saldrás con el primer botón de tus blue jeans desabrochado. Entonces habrá anochecido. Yo habré tirado mi saco en el sofá dónde tantas veces se aventuraron mis labios. Pero esta vez iremos a tu cuarto. Las paredes debilitadas empezarán a transpirar todo el amor que iremos gritando. Tu lámpara será el único ojo abierto. Y las calles me siguen llevando, no camino sobre ellas. Serpentean en las plantas de mis pies los quince baches que son la cuenta regresiva hacia tu cuerpo.
En la mano te traigo una rosa y con el índice decidido aprieto el timbre 402 que es el número que me aprendí cuando aprendí a tocarte. Hace un tiempo largo que no respondes al timbre, como si lo hubieras olvidado. La puerta iba estar abierta por si estabas dormida y, sobre todo, para no tener que dar la cara a los vecinos que no podrán lidiar con mi felicidad. El guardia me mira desde la caseta, desamparado. Tiene el pito encendido en los labios para protestar por los carros mal parqueados y por las ausencias que abrazará en el frío. Hay algo de nerviosismo que suda desde la puerta de vidrio. Empiezan a temblar mis rodillas como si estuviera dentro de un campanario. Al frente de tu casa la panadería recibe el hambre como tú me recibirás en segundos. La gente en la fila de la tienda me mira porque no tiene a donde más mirar. Un hombre embriagado por la certeza de una mujer es un espectáculo ineludible de presenciar. ¿No quieres tú ser testigo de semejante espectáculo? Pero te demoras, no suena la gloriosa trompeta de tu timbre. La impaciencia también es un placer difícil de controlar cuando se tiene tus certezas. Encima me estorba la piel que se parece a una brújula ciega apuntando hacia el posible norte en donde estás esperándome. El ascensor suena como un monstruo que tiene ganas de dormir. El lamento lúgubre de las cadenas bajan como un pecado. Las puertas se lamentan al separar el eterno beso del abandono. Apareces con una especie de sonrisa que solo se puede explicar con un evento desafortunado. Tu llamada, como siempre, había sido mentira.

martes, 25 de agosto de 2009

Destello de Tokio Blues.





"Pero lo cierto es que mi memoria se ha ido alejando de aquel prado y son ya muchas las cosas que he olvidado. Al escribir así, persiguiendo mis recuerdos, a menudo me asalta una insegurdad terrible.¿No estaré olvidando la parte más importante? Acaso no existe en mi cuerpo una especie de limbo de la memoria donde todos los recuerdos cruciales van acumulándose y convirtiéndose en lodo?
Esto es cuanto puedo conseguir ahora: asir con fuerza dentro de mi pecho unos recuerdos incompletos que ya han palidecido y siguen palideciendo a cada instante que pasa, y escribir estas líneas con la desesperación de un hombre que va chupándose la médula de los huesos. Ésta es la única forma de mantener la promesa que le hice a Naoko
Tiempo atrás, cuando todavía era joven y mis recuerdos eran mucho más nítidos que ahora, intenté escribir varias veces sobre Naoko. Pero entonces fui incapaz de escribir una sola línea. Era consciente de que una vez brotara la primera frase, las restantes fluirían espontáneamente, pero ésta jamás brotó. Todo era demasiado nítido y yo nunca supe cómo moldearo. El mapa más detallado puede no servirnos en algunas ocasiones por esta misma razón. Pero ahora lo sé. En definitiva -así lo creo-, lo único que puede verter en este receptáculo imperfecto es un texto, son recuerdos imperfectos, pensamientos imperfectos. Y cuanto más ha ido palideciendo el recuerdo de Naoko, más capaz he sido de comprenderla. Por supuesto ella intuía que mi memoria la borraría algún día. Por eso me lo pidió: "¿Te acordarás siempre de que existo y de que he estado a tu lado?".
Este pensamiento me llena de una trsiteza insoportable.
Porque Naoko jamás me amó".



Este es un fragmento de la novela de Haruki Murakami. Tokio blues Norwegian Wood. Tusquets Editores, Mexico, 2005. pp. 16.


Comprendo que cualquiera que lea una reseña quiere leer una de todo el libro. No espera que seleccione vilmente un fragmento y que se reflexione a partir de allí toda una novela, al menos no una magnífica como la del autor japonés. Lo bueno es que esto no es una reseña.

Tokio blues hizo de Murakami un escritor de culto y con razón. Si se quiere saber las verdaderas causas se debe leer la novela o al menos una reseña seria como la que escribe Rodrigo Fresán en El País. Esta como no es una reseña, es apenas una homenaje chupamedias al libro. Se basará en el fragmento que acabo de compartir.

No voy a decir que este fragmento explica o resume la novela. Pero me resulta fundamental para llenar uno de los aspectos que hacen de Tokio Blues una pieza maestra. Estos tres párrafos cierran el primer capítulo. Lo fundamental de estos párrafos, que son un minicapítulo, no es solamente la capacidad de abstraer la trama. Advierte al lector en qué condiciones debe uno envolverse en el relato. Señala un camino nublado en el que en cualquier momento se puede tropezar fatalmente, caer en un pozo secreto del cual es imposible salir, entre otras cosas porque nadie podría escuchar nuestro grito de auxilio. Un pozo parecido al que Naoko le tiene miedo en la caminata que antecede su pedido antiolvido.

El fragmento, sin embargo, tiene una dimensión secreta que lo hace aún más maravilloso. Es aquí, tempranísimo, donde el autor reconoce las miserias de escribir de memoria, donde resalta su preocupación personal sobre la literatura: la literatura está en el limbo y está embarrada de lodo. De un lodo del que va a ser dificil deshacerse. Allí la tarea del escritor: desempolvar la memoria. Está clarísimo el reto que se plantea Murakami en Tokio Blues.

La adevertencia está hecha. Fresán dice que "Murakami -al igual que los Beatles- produce adicción, provoca numerosos efectos secundarios..." Es sin duda una novela que rompe algo, cala prpfundo en cómo se piensa la relación entre literatura y memoria. ¿Serán lo mismo?

Nueva Evangelizacion

Luis Ángel Saavedra (NOTICIAS ALIADAS)
Aporte de Juan Mateo Espinosa


La Iglesia Católica del Ecuador ha logrado un importante apoyo del gobierno para mantener la supremacía en sus tareas de educación y evangelización de los pueblos indígenas amazónicos y otros sectores sociales marginados, convirtiéndola, en pleno siglo XXI, nuevamente en tutora del desarrollo de estos pueblos.

En efecto, el presidente Rafael Correa y el ministro de Educación Raúl Vallejo emitieron el pasado 12 de junio el Decreto 1780 mediante el cual se faculta al Ministerio de Gobierno y Policía a celebrar contratos con las misiones católicas que operan en las provincias amazónicas (Sucumbíos, Orellana, Napo, Pastaza, Morona y Zamora), en la provincia costera de Esmeraldas y en la provincia insular de Galápagos, para financiar el trabajo de estas congregaciones "en pro del desarrollo, fortalecimiento de las culturas, evangelización e incorporación a la vida socioeconómica del país, de todos los grupos humanos que habitan o habitaren dentro de la jurisdicción territorial encomendada a su cuidado, exaltando los valores de la nacionalidad ecuatoriana".

El decreto faculta a las misiones católicas a crear establecimientos educativos, acceder a frecuencias de radio y televisión, coordinar proyectos productivos con los Ministerios de Agricultura y de Ambiente y construir carreteras para acceder a las zonas en las que se ejecuten sus obras misionales. Para todo esto no sólo recibirán el financiamiento gubernamental, sino que contarán además con el apoyo logístico de las Fuerzas Armadas.

"Este decreto es un mensaje grotesco para la humanidad", afirmó Auqui Tituaña, ex alcalde indígena de Cotacachi, en la norteña provincia de Imbabura, cuya gestión municipal recibió varios premios internacionales por su capacidad de administración y por haber transformado a esta localidad en la primera "ciudad ecológica" del país.

Para Tituaña, el Decreto 1780 es una nueva forma de someter al pueblo indígena. "No puede ser que en el siglo XXI, el gobierno crea que los indígenas necesitamos que nos den pensando, que nos den hablando, que decidan por nosotros. Así piensan los que siempre han querido someternos", afirma.

¿Estado laico o confesional?

El decreto, que se fundamenta en caducos acuerdos celebrados por el Estado ecuatoriano con el Vaticano, como el denominado "Concordato con la Santa Sede", firmado en 1862, y el acuerdo adicional, denominado "Modus Vivendi", de 1937, contradice los principios de un "Estado laico", como se caracteriza al Ecuador en la Constitución del 2008, y nuevamente mezcla las responsabilidades del Estado con las tareas específicas de una congregación religiosa.

"Este decreto convierte al Ecuador en un Estado confesional. La paradoja de la historia es que el Estado confesional que ha cedido la soberanía, los territorios y sus poblaciones a las tareas de la evangelización y encomienda, ha sido realizado por un gobierno que tiene toda la fama de ser de izquierda y que utiliza la retórica del socialismo del Siglo XXI para legitimarse", asegura el analista político y ex ministro de Economía Pablo Dávalos.

Llama la atención también la inclusión de los pueblos "ocultos" o "no contactados" en este decreto, al asegurar que éste rige para "los grupos humanos que habitan o habitaren" en el territorio encargado a las misiones.

"Otra vez nos han entregado en cuerpo y alma a la Iglesia [Católica]. Hemos vuelto a la Colonia, a la época en que los indígenas éramos cazados y arrastrados a las encomiendas para que nos evangelicen y nos incorporemos a la vida económica", asegura la ex asambleísta indígena Mónica Chuji, quien defiende el derecho de aislamiento de los pueblos no contactados. "Las misiones religiosas ahora están autorizadas para buscarlos, educarlos y evangelizarlos".

Para Chuji, también es polémico que el decreto delimite el marco de la educación en pro de los valores de la nacionalidad ecuatoriana: "Es un intento de homogenizar nuestras culturas y nuestros valores. No se considera que ante todo somos indígenas, de nacionalidades distintas; esto pesa más que la denominada nacionalidad ecuatoriana", afirma.

Evangélicos protestan

Por otra parte, las organizaciones indígenas evangélicas también han rechazado el Decreto 1780 por ser discriminatorio: "Condenamos la decisión de privilegiar y favorecer a la Iglesia Católica con los recursos del pueblo ecuatoriano, y excluyendo, discriminando y ofendiendo a la población evangélica y otras religiones que se profesan en nuestro país", dice un manifiesto divulgado por el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicas del Ecuador. La Iglesia Evangélica fue la pionera en establecer sistemas de educación y desarrollo que modificaron las formas de vida de los pueblos indígenas amazónicos.

También sectores progresistas de la Iglesia Católica se han pronunciado: "Puede que el decreto tenga buenas intenciones, pero a estas alturas de la historia usar palabras como ‘evangelización’ o ‘incorporarlos al desarrollo’, sin duda borran las buenas intenciones", afirma Xavier Villaverde, del Fondo Ecuatoriano Populorum Progressio, entidad religiosa jesuita que ha apoyado el desarrollo de sectores indígenas y campesinos en el Ecuador.

Para Dávalos, el gobierno de Correa "es un proceso conservador, involutivo políticamente, regresivo en materia de derechos".

Las decisiones gubernamentales respecto a los pueblos indígenas y otros sectores sociales, como las mujeres, parecen darle la razón a Dávalos, pues no se puede explicar de otra manera la eliminación de las instituciones autónomas de desarrollo y educación indígenas y su incorporación en una planificación centralizada, así como la eliminación de la autonomía del Consejo Nacional de las Mujeres (CONAMU), institución que se encargaba de promover el desarrollo y el respeto de los derechos de la mujer.

La reacción de los pueblos indígenas no ha tenido hasta el momento la suficiente fuerza como para forzar la derogatoria del decreto, pues aparte de los pronunciamientos de rechazo, no se han definido otras acciones; incluso, la primera demanda de inconstitucionalidad del decreto provino de sectores mestizos que intentan mantenerse en el espectro político nacional.

El movimiento indígena se mantiene en la encrucijada: apoyar un proceso de reformas gubernamentales impulsadas por Correa que puede beneficiarlos en cuanto a inversión social, pero que puede destruirlos en cuanto a identidad y permanencia como nacionalidades; o asumir la decisión de oponerse a un gobierno que los está golpeando sin consideraciones: el Decreto 1780 es sólo uno más de estos golpes.

sábado, 22 de agosto de 2009

A propósito del pasado bicentenario y caminando hacia la masacre de 1810...

Esto debí haberlo puesto en nuestro blog mucho antes. Perdón por la demora.

BICENTENARIO 2009

¿qué se festeja? ¿Independencia? ¿De quienes?

Durante estos últimos días y meses se ha venido promocionando la celebracion del Bicentenario de la independencia del Ecuador, organizado un sin número de actividades festivas a lo largo y ancho del país. Sería ingenuo y banal decir NO, a esta fiesta. Sin embargo, es necesario mirar un poco más allá. Mirar que hay detrás de este festejo. Festejar y recordar algo o no hacerlo también tiene un peso simbólico y político que no se puede obviar, si de verdad se quiere transformar y revolucionar las estructuras del sistema, debemos también empezar a romper la colonialidad de la historia, de los recuerdos y los festejos.

Hace 200 años en Quitu se dio el primer grito de la independencia de casi todos los paises de Latino América, que es el primer intento de las colonias españolas de América por obtener la libertad. Este proceso independentista terminaría obteniendo la “libertad” de todas las colonias de España en América. Para posteriormente crear nuevas republicas libres. Nace así la época republicana para las tierras americanas.

Reflexionemos más, sobre lo que realmente pasó. Fue realmente una verdadera independencia para los pueblos de Ámerica? Para los pueblos originarios y para los mestizos y los afrodescendientes? Muchas miradas históricas nos dicen que no fue así.

El motivo de este proceso independentista, no fue la liberación de los pueblos oprimidos por la corona española, ni la busqueda de una equidad social, política ni cultural, respondió a intereses particulares de la clase criolla (españoles nacidos en Ámerica), que bajo un contexto político desfavorable a sus intereses particulares optaron por movilizarse y tomar el poder bajo sus pies. Durante la colonia , el poder real tanto político, económico como cultural estaban en manos de la realeza española, quienes ejercían su poder a través de la clase criolla americana. En el contexto histórico del primer grito de independencia, peligraba el poder político de los españoles sobre su propia tierra y obviamente sobre sus colonias. Es así que la clase criolla opta por adueñarse de las tierras y recursos americanos.

Sin embargo, la realidad de los pueblos que siempre fueron oprimidos como son los pueblos indígenas, mestizos y afrodescendientes nunca lograron avistar verdaderos cambios para bien. A pesar, de que muchos indígenas, mestizos y afro descendientes participaron en el proceso independentista, nunca tuvieron oportunidad real de una influencia en el proceso, solamente fueron carne de cañón, la opresión sobre los pueblos no cambio en nada.

Una prueba de que la situación para los pueblos oprimidos no cambio en nada, se demuestra durante la época republicana, donde continuaron uno tras otro los levantamientos indígenas en contra de la opresión del estado, que no fue creado para cambiar y mejorar la situación de los pueblos, sino mas bien para continuar con las mismas prácticas de explotación, el único cambio sucedido fue un cambio de patrón, una de las luchas más representativas fue el levantamiento de Fernando Daquilema, quien con miles de indígenas decidieron levantar su voz contra el tirano que mantenía los mismas estructuras de explotación contra los pueblos originarios de estas tierras, y quienes incluso ofrendaron con su vida estos procesos de lucha y combate en el gobierno de García Moreno.

Los nuevos estados latinoamericanos fueron construidos a la medida de la clase criolla y pudiente de las grandes ciudades, es decir, quedaron fuera de esa construcción la gran diversidad de pueblos de la ámerica indígena y mestiza, quienes nunca tuvieron una participación real dentro de los estados creados, tampoco se tomo en cuenta sus propios procesos políticos de insurgencia. Lo creado con la independencia fueron estados uninacionales, bajo una sola mirada y una sola dirección política cultural.

Hoy los pueblos seguimos luchando y construyendo procesos de organización que nos lleven la autodeterminación de los pueblos. La Independencia no se ha dado, NO FESTEJEMOS algo que para los pueblos oprimidos de la ámerica india, mestiza y afro descendiente no fue real, ni tampoco lo es ahora. Como lo demuestra el decreto 1780, donde se vuelve a revivir esos aires coloniales, a través de la entrega de la educación pública, salud pública, y el poder de organizar comunidades entre otras cosas a determinadas órdenes religiosas con el fin de “evangelizar” e “integrar a la vida nacional” a los pueblos indígenas de la Amazonía, Galápagos, y Esmeraldas. Decretos como estos nos hacen pensar que tan “Independizados” estamos de los poderes coloniales.

Pensamos que si hay algo que festejar y recordar es la lucha de los pueblos en su permanente busqueda de autodeterminación. Nos preguntamos ¿por qué no se festeja y se recuerda el levantamiento y la lucha de Daquilema, de Manuela Leon, por la libertad del pueblo indio? ¿Por qué no se festeja y se recuerda la lucha de Túpac Amaru por la libertad de la América india y mestiza?

Cien años antes que los criollos independentistas se organicen, los pueblos oprimidos se sublevaban contra la corona española, logrando poner en peligro el poder español y criollo. Obviamente quienes condenaron y acallaron el levantamiento fueron esos criollos y españoles que nunca quisieron que los indios y mestizos tengan autodeterminación de sus pueblos. Y así las luchas populares nunca se recuerdan ni se festejan, como si estas no existieran.

Hay una especie de neo colonialidad del recuerdo, se festeja lo que la gente poderosa hace o deja de hacer, y son ellos los que nos dicen también que hay que recordar y festejar. Lo que no se recuerda simplemente no existió, es una especie de negación de la historia de los pueblos. Al poder neo colonial no le interesa que los pueblos recuerden su historia llena de luchas, es mejor que pensemos que ya nos independizamos y que ya somos libres, pues así ya no hay necesidad de seguir luchando.

Detrás de este Bicentenario, conciente o inconcientemente se esta festejando una toma del poder criollo y burgues, pero no un cambio real en las estructuras sociales. Y a la vez se desconoce las luchas populares por la autodeterminación. Seguimos viendo y viviendo la historia solo desde el poder.

Entonces, ¿que se festeja? ¿Independencia? ¿De quienes?

DIABLUMA
ORGANIZACIÓN POLÍTICA CULTURAL

PD de FG: la sabiduría popular suele decir que la historia se repite... y estos vientos de guerra que andan silbando en el región me quitan el sueño, y espero que si alguna guerra viene por acá no necesitemos de curas como Cuero y Caicedo para detenerla! Ojalá no recordemos un bicentenario de masacre imperialista el próximo año. Pilas ahí muchach@s, pilas ahí...

jueves, 20 de agosto de 2009

El enfoque personal de las independencias (Apuntes).

El ciclo de conferencias y de sinposios llevados a cabo en Quito hace nomás de un mes dejaron abiertos espacios por donde podemos meternos con garrote en mano hacia el pasado. Con garrote en la una mano y con la libreta de apuntes en otra. Pues, como bien sabemos, la historia que nos han venido contado de nuestras independencias propone, primero, una ofensa a la historia de los pueblos oprimidos de las Américas y, segundo, una narrativa vaga, lineal y repleta de vacíos. Esta historia no solamente ha sido contada en las aulas de nuestro país y nuestro continente. Es un relato que se ha instalado en diferentes esferas del espacio público y lo ha hecho como una verdad incontestable. Es natural, contarla es una forma de reproducir el colonialismo que aún nos arremete. Está presente en los museos, en los diarios, en la televisión. Para dar un ejemplo claro del descaro con que se la sigue entablando como verdad voy a contar lo que sucedió en el acto de inauguración. Después de las posiciones de los expositores del día 1 el alcalde de Quito, Andrés Vallejo, levantó su discurso pontificador no solo ante los presentes sino ante los especialistas historiados como queriéndo ofrecerles una clase gratis en la materia. Quedó en ridículo, claro, y esto sería simplemente anecdótico si no fuera tan indignante. Como dije, después del esfuerzo desmitificador de las ponencias frente a la mentira del discurso oficial, el alcalde de Quito vino a repetir en un discurso tan largo como aburrido, lo chuchas que son nuestro próceres del 10 de Agosto de 1809 y cómo esa sangre valiente corre por las venas de los quiteños. Yo no estoy desmereciendo la lucha de aquellos que se levantaron 200 años atrás, solo digo que esa no es, no pudo haber sido, el total de la lucha de los pueblos de América, ni ellos los representantes de los mismos. Recordemos que el Marquez de Selva Alegre y sus boys pertenecían a una clase tremendamente acomodada y que en su lucha no solamente planteaba un modelo enciclopédico y liberal del estado, sino que lo proponían por defender sus riquezas y sus intereses. Es válido mencionar en este punto que varios ponientes en la conferencia, entre ellos el pana Marchena, concordaron en el hecho de que varios de los movimientos independetistas de las Américas(algunos de estos liderados y protagonizados casi por completo por criollos de alcurnia) ni siquiera estaban seguros de si continuar o no bajo el régimen imperial. La idea del estado liberal-jacobino se consolidó en pocos rincones de América, uno de ellos, en Quito. En Ecuador en particular este modelo llegó a prosperar una vez obtenida la independencia. Un modelo en el que, según Dussel, se propone un nuevo concepto y una nueva praxis de la soberanía, del soberano, en relación a la idea imperial pero que seguía excluyendo al pueblo. Recordemos que en los inicios de la república ser ciudadano era más dificil que convertirse en astronauta. En varias de las contituciones de nuestra patria se establece que solo podían ser ciudadanos hombres, católicos, pasados cierta edad, hispanohablantes y, por sobre todas las cosas, que tengan bienes por sobre una cierta cantidad de dinero. El resto no existían formalmente y en la realidad se los desaparecía como sucedió en la pampa argentina. Este hubiera sido el estado que se hubiera forjado en 1809m era nada más que una anticipación de lo que fue una década y media después.

Sin embargo no todos pensaban así. Dussel habló de que no solamente existía este pensamiento liberal-jacobino entre los pobladores de nuestra región. Pensamiento que por ejemplo incluía a Bolívar y a San Martín. Pensamiento que por ejemplo rechazó a su manera Artigas y que trató de ejecutarlo Hidalgo. Pensamiento que, por otro lado, ocasionó genocidios como con Sarmiento. Todos deben estar en el paredón de la historia en este momento. Esta discordancia entre los llamados próceres, solo nos pueden llevar a pensar una cosa. Que la idea liberal-jacobina del estado no era la única que se fraguaba en esos momentos. Es allí donde Dussel habló de un Pensamiento Latinoamericano que si bien no se lo puede registrar con claridad (obviamente se hizo todo lo posible para que no surja) incluyó en distintas etapas a varios de las figuras más importantes de nuestra independencia aunque de maneras parciales. La lucha anticolonial, por ejemplo, era una prioridad para cualquier lucha latinoamericana. Otro de los ejes sobre el cual gira el PL es una nueva idea de soberanía que, en cambio, no pudo ni debió instalarse porque era contradictoria con varios de nuestros libertadores.
El primer punto de la independencia se alcanzó parcialmente. Bolívar la hizo prometedora. Creo que la importancia de Bolívar no fue mencionada por Dussel durante su conferencia. A pesar de que el pensamiento bolivariano ignorara el segundo eje del llamado PL, fue más allá de estos dos ejes mencionados. El primero se conquistó parcialmente, dadas las circunstancias objetivas de la época: eliminar el yugo de la corona española. Digo parcialmente porque no se aniquiló a los verdugos de los pueblos y en cambio las clases burguesas nacientes y las clases hacendadas utilizaron al estado como un dispositivo de poder, de opresión y como medio de legitimar a las mismas. Ese es el vicio que crea el estado, que decreta enemigos por nacionalidad, nos da un sentido de pertenencia alejado de nuestra realidad inmediata y nos hace vibrar por sus victorias. Por lo tanto oculta a nuestros opresores endémicos (esa es la idea, daahh!, a veces si soy bien huevón). Bolívar no pudo evitar esto e ignoro si esa fue su intención. Hasta podría pensar yo que le allanó el camino a las nacientes oligarquías y a los omnipresentes terratenientes (que palabra más infeliz). Pero el sueño bolivariano iba más allá como dije, gira entorno a un tercer eje que implica el reconocimiento de los pueblos de América como hijos y sujetos de una misma realidad histórica. Nosotros los hijos de Bolívar, hijos bastardos a veces, hemos tenido la suerte y tenemos el deber de recoger su sueño: la Patria Grande. Claro que este tercer eje, por lo menos a mi, me resulta contradictorio con el estado liberal que se inauguró a partir de las Independencias, otra vez, no sé si con el consentimiento del libertador o no. Ahí me queda un vacío y para eso tendré que leer a Bolívar y a Rodriguez para comprobarlo o esperar que alguien me lo explique, ojalá que por esta vía. Yo sospecho que Bolívar pensó la Patria Grande bajo el paraguas del estado liberal, pero esa es una irresponsable supocisión, síntoma de un excesivo razonamiento barroco.
En todo caso creo que la única manera en que podemos entender las luchas de hoy es entendiendo las de entonces y para eso debemos decontruir la historia y someterla a exámenes de laboratorio para irla poetizando de a poco. El caso es que la utilidad de un congreso como el que ocurrió pocas semanas atrás solo se verá en el momento en que, a través de la lucha social, reconquistemos nuestra historia. "A un reino le es lícito reconquistarse," dijo Dussel que dijo Morelos, refiriéndose al hecho de que es la gente quien debe decidir como contar su historia. Para conquistar nuestra independencia definitiva debemos tomar en cuenta cómo se lucho antes aprender de los errores tácticos de entonces y comprender que la lucha no tiene como fin la victoria sino la lucha misma.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Zoom. (Cuento)


María Gabriela Alemán.

Huelo a chimpancé. Es un resorte primario, un llamado que tendría razón en las montañas, pero que causa rechazo en la ciudad. Tengo que disimular con fragancias que lo ocultan. Pero no es mucho lo que puedo hacer, los jabones solo borran suciedades y lo mío no es tierra, sino algo diferente. Es mi cuerpo poblado de disimulos furiosos que buscan su escape en los poros de mi piel.
Este olor: mi manera de llamarte.
Los ojos ocultan, pueden cambiar según el colo de la ropa o la luz del día, pueden ocultarse detrás de gafas y así, también, el tacto resulta demasiado directo y racional. Sobre el olor, en cambio, no se posee ningún control. Es embarazoso.
No puedo mantener mi propio espacio debido a él, ha crecido hasta hacer desaparecer todas mis iniciativas. Y al abordarme así, sin precaución, dejándome sin respiro, me entrega sin límites a ti. Temo los días que no podré verte pues sé que el olor los hará sofocantes. Pero no atrevo mi paso en tu dirección porque mi olfato arrasa con mis otros sentidos y dejo de verte, de sentir tu presencia y sólo me preocupa una vergüenza creciente. Entonces, prefiero mirarte de lejos y observar el mundo con ojos de bebé recién nacido, no reconocer mis impulsos y volverme inútil. Con esta mirada vacía, en esta cara adulra, se vuelve imposible adivinar mis pensamientos.
Lo prefiero así. Acercar mi deseo a tu sombra. Adivinar lo que haces sin saberlo, por no poder mirarte. Visitar tu lugar de trabajo cuando no estás, merodear los alrededores, esperando que tu cercanía calme mi cuerpo.
Por lo pronto los resultados no han sido alentadores.
El olor se vuelve punzante y crece en intensidad. He tenido que recurrir a farmacéuticos que me han recomendados productos importados. He pensado en visitar a médicos, pero qué decirles, que mi celo es enorme, preocupante. Que avasalla mi vida. O, tal vez, buscar el consejo iluminador de un analista que me hable de un complejo reprimido de un trauma mal resuelto.
Sé qué tengo que hacer, pero soy una serpiente mordiéndose la cola. Para acercarme tengo que cambiar y eso es imposible: siempre somos el resultado de nuestros actos pasados. Y aunque un día me pinte de azul y otro sea una cenicienta inoportuna y al quinto día mida mi futuro con alegría, sólo seré la esencia de mi carácter y tendré mi cuerpo, como una ventana, abierto para ti.
Cualquier certeza es inútil, me llevaría a eternizar el momento. Prefiero continuar trepando, lenta, a un cerpúsculo eterno donde la felicidad y la trsiteza se fundad; donde una gripe no te impida ir al trabajo y yo pueda acercarme sin temor.
Adivino, sin embargo, que ése no es el camino. He descubierto que la paz atenúa de alguna manerta este olor y el sueño repara por completo. Amanezco en un ambiente neutro y descontaminado; es el movimiento, el sol inundando la cama el calor aplastante de sauna que crece en el cuarto, lo que imposibilita que todo continúe normal. El olor trepa por mis axilas y mancha las mangas del pijama. En ese punto, la ducha es un mero devenir. El olor es soportable hasta que acerco la toalla a mi cuerpo y me seco
Soy una burla, un repaso de chistes y mala conciencia.
Pero que tiren la primera piedra los que nunca dudaron en levantar el brazo en un bus atestado de gente; quien no quiso impresionar a una muchacha con un aroma perfecto y alzó los puños victoriosis y descubrió el vaho que huía de su piel.
Que atreva su paso por esta vereda, que me recrimine por este olor, pues su respiración no es parte de mi maldición. Mis convicciones, aunque rayanas en la obsesión, son mías. Desconozco cuáles son las de los demás. Pero todos abrazamos algo similar. Algo que es nuestra desgracia y es, a la vez, nosotros mismos.
Yo soy este olor que no existía antes de ti.
¿Será mi destino, mi maldita bendición?
La noche me lleva a pensar que no es sólo el deseo lo que me aleja, sino el miedo. Mi temor a ser rechazada o a iniciar un afecto absoluto que me convertiría en un animal de compañía. Ése es el olor que me envuelve; eso es lo que me hace florecer como una pestilencia.
Y como no todo es higiene, y aún así es algo indispensable, me alejo de esta voluptuosidad. Invento la manera de no degradar mi cuerpo a una combinación química con objeto de uso. Dejo de visitarte, alejo tu imagen de mi cabeza. No es imposible, me recupero como un drogadicto rechazando un mal hábito. Es sólo cuestión de tiempo y, sin malgastarlo, busco otros entretenimientos: un libro releído cientos de veces, una cena costosa, un pantalón nuevo.
Me libero así del encantamiento. Puedo habitar la vida como antes, como después, rompiendo el camino que conduce a Oz.
Aunque cada tanto, como un animal atrapado, me refugie en un rincón y con la ayuda de una linterna, en plena noche observe los rasgos de tu rostro, sobre una fotografía, mientras siento ese olor que, como una cachetada, atesta mis sentidos y me sofoca dentro de la habitación cerrada.

De Zoom, Quito, Eskeletra, 1997.

Maria Gabriela Alemán


Biografía de Gabriela Alemán:

sábado, 15 de agosto de 2009

Esperando la Gran Novela Ecuatoriana

Este se ha convertido en un tema de conversación recurrente en varios círculos de intelectuales de los que he sido testigo porque abre una pregunta: de si ya se escribió la gran novela de nuestro país. La cuestión se pone más seria a un cuando los círculos intelectuales encima se vuelven localistas y regionalistas. Ahí es más grave, ahí se preguntan sobre la gran novela de Quito o Guayaquil y ya mismo se van a preguntar por la gran novela de Tumbaco o de Ficoa. Tremendo. Lo peor es que en estos círculos de escritores y críticos (que además sin un mínimo temor a la soberbia postulan nombres como si esto fuera un concurso de belleza, esto, por cierto, me parece más grave que autopostularse como el gran novelista ecuatoriano) han definido ya lo que sería la gran novela ecuatoriana: una novela total.
Y bueno. Yo no se lo que será una novela total ecuatoriana, si se referirá a una novela que hable del barcelona, la liga y el emelec o si hablará de las tres regiones o de los 159 partidos políticos de nuestro país, o de todas las mujeres de Vito Muñoz. Todos son temas posibles, se me ocurre. Lo que más me asusta es que hasta se habla de la mínima extensión que debería tener, porque claro, a quién se le va a ocurrir la desfachatez de escribir una novela total de 90 páginas? sería aniquilado en estos mismos círculos. A menos que sea un genio dirán. Así mismo se han planteado modelos, se ha dicho que quién escribirá en Ullyses o el 2666 de la patria. Estamos jodidos entonces porque quienes alguna vez tenemos el sueño de escribir algo parecido a una novela tenemos que escribir en inglés o 1000 páginas en Times New Roman 11! Lo bueno es que yo no entiendo que es una novela total, porque no sé lo que es una novela por completo y menos cómo escribirla. Es una duda tremenda, porque como soy malo para la poesía y los pocos cuentos que me salen bien solo podrían disimularse en una novela, nunca voy a poder escribir en serio, o sin dudas por lo menos. Pero en cambio he visto y conocido tipos que hablan ya de su novela total nunca escrita, hasta saben como van a salir en la foto de la portada, pero no el título. Quizá lo que no se sospecha es que la gran novela ecuatoriana también puede ser una novelita, una cosa chiquita, una semilla. Por suerte el único proyecto de novelista que es mi amigo empezó por el título, entonces no todo es triste en la literatura. Estoy seguro que los futuros novelistas de mi país andan por ahí en las calles, sin chaquetas, ni whikises, ni palabrotas, sino en sus respectivas trincheras fumándose su bareto, escuchando basca, tomándose un vino clos y haciendo el amor no con Madame Bovary sino con la mujer que los convoca.

domingo, 26 de julio de 2009

Las independencias un enfoque mundial.

A partir de Mañana empieza el Congreso Sudamericano de Historia en donde se hará una tratativa sobre los procesos de descolonización con motivo del bicentenario del 10 de Agosto de 1809. Entre los principales ponenetes se encuentra Alejandro Moreano y Enrique Dussel, quienes cerrarán este ciclo de simposios y conferencias este próximo día viernes. Para asistir al Congreso se debe realizar una registración en línea muy sencilla y cubrir el costo de la inscripción. Aquí dejo el link.

http://www.congresoindependencias.com/portal/index.php?idpadre=54&idselec=54&sitio=participante


miércoles, 22 de julio de 2009

Desenterrar el Amor

¿se escogía ("quiero morir contigo") a la persona

con la que uno iba a vivir toda la muerte,

náufragos intrusos en el subsuelo para ver desde abajo

cómo anda el pobrecito amor fugaz en el país de arriba,

y quedarse así embisagrados,

oyéndose para siempre el último parpadeo,

viéndose para siempre el último latido,

condenados a morir a amor lento

sin los tristes despueses del desacoplamiento?

` - Jorgenrique Adoum, El Amor desenterrado


Amar es peligroso, desenterrarlo es herejía

sin embargo amantes, amigos, todos lo hacen

lo hacemos diré, no sé si a mucha honra

o a cuenta gotas, con algo de miedo más bien


amar a secas, así sea en el norte, implica desterrar

al miedo aunque parezca cosa casi que inevitable

particularmente cuándo en el sur, nuestro norte, se

desentierran los cimientos y los (re)sentimientos


amar, así, con minúscula, es simplemente vivir

en todo caso, sobre-vivir, que no es lo mismo

aunque venga siendo igual dónde se esté, aquí

y ahora toca desaprender el miedo para seguir


en esto de vivir, que puede ser, estoy seguro,

cosa de existir para poder morir así, como

seres humanos que no buscan más que vivir

con alguién que nos acompañe en cualquier

destierro



Ricardo Sánchez.

viernes, 3 de julio de 2009

El árbol de la vida.

1.
En el poema "Desencuentros con Julio" Jorgenrique (ojalá me sepa perdonar el abuso de confianza) escribe: "¿y a quién vamos a darle el pésame cuando él se muera si no a nosotros mismos?" Eso me pregunto ahora. Claro es fácil preguntarse esas cosas en este país después de que el maestro ya las escribió. Pero yo me pregunto si no habrá que darle el pésame a la poesía misma. Porque para mi Jorgenrique era sobretodo un poeta y y por eso la poesía anduvo de luto en estos días. Qué vendrá a ser la poesía ahora sin Adoum. Será una señorita de esquina lujuriosa? Una señora de caricias descompuestas? Cómo se la acaricia ahora en todo caso? A dónde habrá ido a parar? dónde buscarla? Creo que la poesía de Adoum, por suerte, no está atrapada en sus páginas. No fue un poeta de escritorio o diccionario. Fue un poeta lanzapiedras, lanzaversos. La poesía de Adoum hay que leerla en voz alta, en las calles, en los buses y en los estadios. Leerla en voz alta para que regrese a su hábitat natural. Leérsela a una mujer antes de meterle las manos y el alma debajo de la ropa, leérsela en modalidad susurro.
2.
Jorgenrique Adoum fue, como dije, un poeta. Esa es mi humilde opinión. Encontré pocos espacios donde se profundizara al poeta y su obra, pero de los pocos que encontré en general se trataba a su novela Entre Marx y una Mujer Desnuda como la obra capital del Ambateño y creo, que en general, se puede estar de acuerdo en eso. En algunas de estos espacios, particularmente en un blog llamado "libros, autores y riesgos," donde se discutía principalmente la ausencia de Adoum en el boom de la literatura latinoamericana, hubieron comentarios desfaortunados por algunos mal llamados "intelectuales." El papel de los intelectuales, de los críticos literarios en particular, no debe ser el de destruir la poesía a costa de elaboraciones académicas, sino, por el contrario, cuidar de ella y, si se puede, entablecer un diálogo que la enriquezca. Esto fue lo que encontré en la crónica del escritor mantense Raúl Vallejo que me la mandaron el Ricardo y el Hernán y que está en la página del telégrafo y en el blog del ministro de educación. Es una pena haberme encontrado con varias opiniones que más allá de calificar la obra de jorgenrique (quién diablo somos para hacerlo?) se han dedicado a apadrinarla, cayendo por supuesto en vergüenza.

3.
Mi homenaje a Adoum es por supuesto más humilde, creo que no puedo caer en el error que acabé de denunciar y por eso me parece detestable darle chance al debate de si jorgenrique era o no del boom o si merecía serlo. Adoum era universalmente latinoamericano, el se fue con ese nombre por la tierra, hasta lugares en que lo veían con asombro y duda, porque creían que solo con hablar iba a levantar un muerto o causar un aguacero. Y no se equivocaban. Jorgenrique descubrió el verdadero nombre de las cosas, el verdadero nombre de la piedra y del hueso. La verbalización poética del sustantivo es lo que les imprime su nombre real, por eso lo acusan de comunista nostálgico, y vaya que lo era, y que hay que serlo, porque desde tiempos inmemoriales le han quitado a la piedra la memoria. Pero esta estaba allí intacta, y esos ojos miopes la supieron mirar con el asombro con que se mira al Pailón del diablo por segunda, tercera y quinceaba vez. Este oficio de jorgenrique, de devolverle el alma a la palabra es lo que le hizo y le hace nuestro poeta mayor. El sabía lo arriesgado del asunto, muchas veces se preguntó si las palabras harían el trabajo del fusil, pero se dio cuenta de que el abrazo y el verso eran (y son y seguirán siendo) un acto más revolucionario todavía (perdón por el cliché). En esta lucha, que también es caricia, jorgenrique nos iluminó los caminos de la poesía ecuatoriana y de la patria grande, de esta ruta en que estamos encaminados desde tiempos ancestrales, aunque no hayamos acertado muchas veces los caminos. Él supo montarse en el endiablado ferrocarril de la lucha por la reivindicación de la palabra, por la reivindicación del hombre. No son pocas las culturas en el mundo en que el término PALABRA y el término con que se define el ALMA es el mismo. Así, al darnos jorgenrique la palabra de nuestras tierras y sus gentes también nos entergó sus almas. Como el árbol le entrega a la vida sus raíces sus tallos y sus hojas y la vida en recompensa le convence al árbol de que son la misma cosa que son, ambosdos, el árbol de la vida.

4.
Cuando empecé a escribir este pequeño homenaje, que no podía tener otro nombre, había acabado de visitar la Capilla del Hombre con algunos amigos. Como bien se sabe los restos de jorgenrique yacen en un pino que florece en uno de los patios donde pasó varios años de su vida su amigo Oswaldo Guayasamín. Quién sabe de cuántas cosas habrán hablado allí incluyendo la promesa de enterrarse juntos en aquel lugar. Me he imaginado ese acuerdo durante mucho tiempo ya y, sin embargo, no se me ha ocurrido ningún verso, ni frase y peor un diálogo. Una lástima, pero esto me ha hecho recorrer la poesía de Adoum con cierta tenacidad. Allí les dejo un fragmento que nunca se me ocurriría, y que es parte del Amor Desenterrado que escribió el poeta a los Amantes de Sumpa.

...¿se escogía ("quiero morir contigo") a la persona
con la que uno iba a vivir toda la muerte,
náufragos intrusos en el subsuelo para ver desde abajo
cómo anda el pobrecito amor fugaz en el país de arriba,
y quedarse así embisagrados,
oyéndose para siempre el último parpadeo,
viéndose para siempre el último latido,
condenados a morir a amor lento
sin los tristes despueses del desacoplamiento?

de El Amor Desenterrado.

miércoles, 1 de julio de 2009

Solidaridad no es intervencionismo


ricardo sánchez cárdenas


La respuesta de la totalidad de gobiernos en las Américas y el resto del mundo al golpe de estado perpetuado por un grupo de militares y elites políticas demuestra dos cosas importantes sobre los desafíos históricos que tenemos por delante, no solo en Honduras sino en toda América Latina.

Primero lo bueno. Los distintos métodos de integración regional en América Latina demostraron su utilidad en momentos de crisis y siguen poniendo presión al gobierno de facto en Honduras y se respete el derecho democrático de un pueblo a decidir su propio destino. Los miembros del ALBA han sido tajantes en reafirmar los principios de solidaridad y democracía que guían a un organismo que cuenta con un consejo de movimientos sociales y rompe con la lógica de mercado de otros tratados internacionales. No se puede llamar de intervencionismo al intercambio solidario de experiencias históricas y la defensa del derecho del pueblo hondureño a ejercer su poder constituyente como los Venezolanos, Bolvianos, y Ecuatorianos lo vienen haciendo en los últimos años. Las diferentes asambleas constituyentes que hemos visto en estos países representan mecanismos novedosos para re-inventar la legitimidad del concepto de "democracia" en una región donde siempre fue prórroga de los poderosos determinar las reglas del juego democrático.

La segunda razón es preocupante. La decisión de secuestrar a un presidente democráticamente electo, como ocurrió en Venezuela en 2002, trae inmediatamente memorias de las dictaduras militares que nos costaron tantas vidas a los latinoamericanos. Con estos recuerdos viene la aún presente amenaza de la agresión imperialista que siempre puede venir del vecino del norte. Si bien es cierto Obama ha sido coherente con la posición democrática de todos los gobiernos de la región no podemos negar que la política externa de "promoción de la democracia" (democracy promotion en inglés) sigue financiando a elites políticas y económicas que constantemente desafian las decisiones democráticas de los pueblos de estos países.

Pero no es solo la memoria de la represión y la tortura que nos debería hacer temblar cada vez que escuchamos de un golpe de estado en respuesta a la decisión de crear maneras de que el pueblo se exprese democráticamente. La experiencia más reciente de "democracias" hipócritas que impiden a la gente ejercer su poder constituyente todavía es la regla y no la excepción en América Latina. Las luchas de los movimientos sociales y la represión de estos tiene que ser entendida como una lacra aún presente que viola los requisitos básicos de una democracia. Nunca podremos entender lo que está en juego en Honduras y en América Latina sin recordar que la demanda por asambleas constituyentes que eleven el derecho al agua y a la soberanía alimentaria a derecho humano, por ejemplo, nacen de la lucha valiente de los movimientos sociales y no de la inspiración de uno u otro lider.

Una interrogante todavía por resolver es por qué una elite se envalentona de la manera en que demuestran los golpistas en Honduras sin el apoyo del emperador de turno. Los Estados Unidos han declarado, aunque ambiguamente, que el único presidente de Honduras es Manuel Zelaya sin embargo no ha tomado acciones concretas para presionar al gobierno de facto del empresario Micheletti. En 2002 en Venezuela, las elites políticas y económicas tuvieron el abierto apoyo del gobierno de Bush que fue el primero en reconocer al gobierno del empresario Carmona que duró menos de 48 horas dada la solidaridad de otras naciones latinoamericanas, la sublevación popular y de los bajos rangos del ejército Venezolano. Ofrezco dos reflexiones sobre este paralelo histórico para tratar de contestar esta interrogante "por ahora".

Primero, es significativo que los dos últimos golpes militares vistos en América Latina son empresarios. Nada más apropiado para revelar la hegemonía del neoliberalismo que aunque moribundo sigue influenciando a grandes sectores de las clases medias y a la derecha neoliberal que últimamente no tiene empacho de actuar de manera anti-democrática. Es importante reconocer esa hegemonía para no dejarnos engañar por los ternos y las corbatas de empresarios que igual que los dictadores militares de nuestra historia son resultado de la desigualdad (neo)colonial.

Por último, podemos pensar que esta actitud aparentemente irracional de una elite centroamericana, acostumbrada a usar las armas de los militares para reprimir las legítimas de uno de los pueblos más pobres del continente, resulta precisamente de la desigualdad social. Es la tremenda desigualdad de varios tipos que han sido la regla social por excelencia en la historia de las Americas que produce este tipo de escenarios históricos. La desigualdad social resulta en polarización política cuándo las elites deciden que sus intereses están bajo grave riesgo dadas las actitudes de un actor político poderoso como el gobierno, al que muchas elites en la región estaban acostumbrados a manejar a su antojo. Cuándo el gobierno crea mecanismos para que sectores populares hagan demandas históricas para reconocer la injusticia de la desigualdad que viene desde tiempos coloniales, y que afecta particularmente a los pueblos indígenas, a l@s campesin@s y trababajador@s, a aquellos que históricamente nunca fueron escuchados en el gobierno, como lo puede llegar a ser una asamblea constituyente se lo acusa al presidente de turno de crear la polarización socio-política. Todo proceso de cambio social implica una polarización socio-política particularmente dadas las condiciones históricas de desigualdad en la región. Es por esto que el desenlace de esta amenaza a la democracia de nuestra América no puede ser entendido por lo que hagan o digan los hondureños que sienten que una asamblea constituyente solo sirve para que un presidente concentre más poder pues en el fondo estas clases sociales lo que sienten es miedo a la posibilidad de que el cambio social afecta a sus intereses personales. El desenlace será el resultado de lo que pueda hacer el pueblo hondureño, su poder constituyente, y la solidaridad de los otros pueblos que siguen luchando por que se les reconozca el derecho a definir lo que significa "democracia" y "derecho" en sus países. Es mucho pedir?

lunes, 29 de junio de 2009

Francisco Gachet opina sobre Honduras.




Sin intenciones de refutar las ideas de nuestro compañero Fernando acerca del golpe de estado militar hondureño, estas breves palabras solo intentarán profundizar un poco acerca de la situación actual de Honduras, releyendo parte de su dura pero común historia como país centroamericano.

Algo peculiar de la política hondureña es que, como en otros países latinoamericanos que han sufrido de la audacia y violencia de regímenes dictatoriales, la ciudadanía ha tenido únicamente dos alternativas políticas que han delineado el progreso social y económico de esta nación: el Partido Liberal (al cual Zelaya pertenece, e irónicamente Micheletti-ex presidente del congreso hondureño- también) y el Partido Nacional (también conocido como industria bananera o United Fruit Company/Brands).

Las dictaduras en Honduras comienzan con el general Tiburcio Carías Andino (1933-1949) y se intensifican con el primer golpe de estado de Oswaldo López Arellano (1965-1974) responsable de la famosa guerra del fútbol en 1969 (irónico nombre que se dio a una guerra provocada por la explotación de campesinos salvadoreños que, sin acceso alguno a tierra en su país, migraron masivamente a Honduras de donde también fueron expulsados de regreso a una tierra que no lo quería).

Posteriormente, en 1974, otro golpe de estado militar proclama a Policarpo Paz García como “presidente de Honduras”, para que en 1980 aparezcan los primeros destellos de democracia en este azotado país centroamericano. Lamentablemente las urnas, como lo explica el Tobi, no aseguran la democracia en ningún país: en estas elecciones aparece triunfante el gobierno de Roberto Suazo Córdova que permitió, entre otras cosas, la transformación de Honduras en una base militar estadounidense cuya finalidad era intervenir directamente contra la revolución Sandinista en el vecino país de Nicaragua que, para esas épocas, ya consiguió derrocar a la dictadura de Somoza y alumbró a toda una región con esperanzas de progreso democrático.

Y de ahí, hasta ahora, la ciudadanía hondureña ha luchado por mantener una democracia a veces ilusoria pero con importantes progresos: en los 90 el partido liberal logra abolir el servicio militar obligatorio y reduce sustancialmente el poder militar, y más recientemente en el período presidencial de Zelaya se consiguió estabilizar precios, se logra una condonación de aproximadamente 1400 millones de United States Dolar por parte del BID, hubo un fuerte interés en la integración latinoamericana y se trató de cambiar la perspectiva de las duras y discriminantes políticas usadas por el ex presidente hondureño Ricardo Maduro para tratar la problemática centroamericana de grupos pandilleros.

Y llegamos, pues, a un momento en donde la historia parecería repetirse, donde el poder militar y económico, una vez más, intentan (y logran) sublevarse al clamor popular latinoamericano. No sabemos aún, y no me atrevo a vaticinar, cómo terminará este duro pero repetido episodio de la política centroamericana. Sin embargo no creo que la historia se pueda repetir, menos aún cuando sabemos que nuestro continente se encuentra en un proceso de transformación sin precedentes. Por fin podemos responder a un cuestionamiento planteado por un buen amigo nuestro, al cual deberíamos estar siempre agradecidos por sus inspiradoras ideas: América por fin respondió! ya no es tan joven como solía ser!

Te Estoy buscando América y temo no encontrarte.
Tus huellas se han perdido entre la oscuridad.
Te Estoy llamando América pero no me responde.
La han desaparecido los que temen la verdad.

Envueltos entre sombras, negamos lo que es cierto:
mientras no haya justicia, jamás tendremos paz.
Viviendo dictaduras, te busco y no te encuentro.
Tu torturado cuerpo no saben dónde está.

Te han secuestrado América, y amordazado tu boca,
y a nosotros nos toca ponerte en libertad.
Te estoy llamando, América. Nuestro futuro espera.
Antes que se nos muera, ayúdenme a buscar.

Te estoy buscando América, te estoy llamando América.

Rubén Blades (y los 6 del solar)

Para mayor información sobre la historia hondureña y centroamericana visiten wikipedia.

¿Un golpe útil?



Obviamente no se puede caer en ese exceso de nihilismo y simplemente detallar los resultados materiales del suicida golpe de estado llevado a cabo en Honduras el día de ayer. Pero es verdad, es un golpe que en buena medida destapó algunas debilidades del enemigo, de la brutal y sangrienta oligarquía latinoamericana.

Primero. ¿A alguien le sorprende?

Aunque para muchos no es razón para sorprenderse, la doble moral de la oligarquía quedó más expuesta que nunca en este golpe de estado. A lo largo de toda la región la derecha se había declarado fiel defensor de las democracias, hasta el punto en que el presidente de facto hondureño, Micheletti, alegó haberse instalado en la presidencia de la nación por vías democráticas. Una broma de mal gusto, ojalá. Está claro, entonces, que la versión oligárquica de democracia está muy alejada de la del pueblo o ya de plano, de la vida real. Ya no es de sorprenderse, los círculos de poder dominantes en nuestros países aman a la humanidad, pero odian a la gente. Por eso el gobierno de facto del hermano país centroamericano ha violado los derechos constitucionales de su pueblo: así lo protegen. Queda revelado entonces que la multiburguesía internacional tiene una agenda clara para nuestros pueblos escondida detrás de un discurso que en realidad es todo lo contrario a la práctica. Cuidado con que creamos que ganando elecciones ganamos la democracia. Los métodos de los Uribes, los Garcías y Michelettis son tramposos, afortunadamente hoy por hoy hay menos gente que les cree.

Segundo. Tus patrones no quieren que abraces a tu hermano.

Una de las razones que no menciona Micheletti para justificar su golpe de estado es el reciente giro de Honduras hacia la América Bolivariana. MIcheletti y sus boys han pasado hablando de que la violación de la sagrada constitución hondureña fue la razón para reemplazar a Zelaya. Y sí que es sagrada, a través de esta obsoleta constitución es que los grupos de poder de este país han oprimido a sus bases sociales. No nos olvidemos de la triste y sangrienta historia hundureña que protagonizaron los mismos que hoy ejecutan el mismo golpe. Zelaya cometió el pecado de preguntar (querer preguntar), en una encuesta no vinculante, si era pertinente una Asamblea Constituyente para escribir una nueva carta constitucional o en todo caso profundizarla. A la oligarquía y las élites militares les pareció una mala idea y como niños chiquitos escondieron las papeletas. Los hondureños entonces ya empezaron a movilizarse. La consulta se iba a llevar a cabo el mismo día del golpe. A Zelaya no le perdonan que el pueblo esté con él. Tampoco le perdonan que le hayan condonado la deuda a Honduras y peor que se haya integrado al ALBA. Y es lógico, a la oligarquía no le conviene ninguna de estas cosas, por el contrario. La oligarquía Hondureña necesita al pueblo silenciado y desmemoriado, necesitan la deuda externa para seguir negociando con el trabajo de su pueblo y por supuesto, necesitan mantener aislada a Honduras de las nuevas olas revolucionarias de nuestra América. Los verdugos de antes son los verdugos de este día en que ha muerto ya un compañero hondureño en las protestas.

Tercero. El golpe útil.

Puede resultar horroroso que yo pueda hablar de las bondades de un golpe de estado. Ojalá no se me interprete así. Tampoco me gustaría demostrar la relevancia a nivel geoplítico de la torpeza que llevaron a cabo los militares y la oligarquía de ese país por sobre el principio de la democracia, eso sería insultar a los hermanos hondureños. No existe justificación en la tierra para que un grupo minúsculo sin representación alguna en la gente, por el contrario, verdugos históricos del pueblo, tomen el poder político de la manera en que lo hicieron. Me llena de dolor y de angustia y sobretodo de indignación. Y esa indignación es la que ha levantado al pueblo hondureño que es el único que le puede dar el golpe de gracia a la torpe burguesía de aquel país. Si regresa Zelaya no habrá triunfado Zelaya, habrá triunfado el pueblo Hondureño, los pueblos libres de la Indo-Ibero-Afro-America. Adicionalmente, quisiera hablar de la eficaz acción de los gobiernos del ALBA para enfrentar esta situación. Los estados integrantes de este régimen basan su relación en la solidaridad y hermandad de los pueblos dentro de estos. Este golpe en Honduras probó la unidad de la América Bolivariana y fortaleció la base de sus principios y sus procesos revolucionarios de cambio. Una vez que regrese Zelaya la integración solo puede consolidarse y tendrá en Honduras una sede de la Patria Grande que queremos todos.

miércoles, 10 de junio de 2009

Es solo un partido?


El fútbol se parece a dios en no pocas cosas. La fe ciega de los fieles (en este caso hinchas), las enormes cantidades de dinero que se ha hecho en su nombre y el hecho de estar siempre bajo sospecha de los intelectuales. Cierto o no lo importante es que mañana a eso de las 4 de la tarde todo el país va a estar pegado a un televisor para ser testigo de los por menores de la selección nacional frente a la Argentina de Maradona. Esto no es un fenómeno menor. Seguramente si las elecciones en nuestro país no fueran obligatorias habría menos gente interesada en su voto que en un partido de la selección. Esto ya ocurre porque los niños no votan de modo que la comparación hasta resulta irrisoria. Pero me voy a arriesgar un poquito más. Este fenómeno se me antoja evidente porque también existe mayor interés en conocer el nombre del delantero titular de este miércoles antes que el de todos los candidatos al parlamento andino juntos. Probablemente ni siquiera exista tanto interés en saber que cuerno es un parlamentario andino, en relación al once que formará mañana Maradona frente a Ecuador. Ni mañana, ni el jueves y ni siquiera el domingo. Porque el domingo, día de elecciones, se seguirá hablando del triunfo, derrota o empate de la selección, o en el peor de los casos, al menos en los diarios quiteños, se hablará del Liga-Quito del sábado. ¿Es el fútbol importante en sí mismo como para crear semejante convulsión en los ecuatorianos, o esta relevancia que se le da es producto de alguna carencia o falla de nuestra sociedad? Obviamente yo no tengo la respuesta, no sé quien la tendrá y sería interesante profundizar y debatir esta pregunta en este espacio. Por lo pronto a mi me queda el consuelo de poseer una intuición, desde mi posición de ecuatoriano fanático del fútbol más que de la de un analítico que no soy.

Cuando yo era más chamo y mi viejo me llevaba a ver a la Liga al estadio olímpico, veía como el tipo podía transformar su estado de ánimo en armonía con el estado de ánimo del equipo. Entonces solo lo veía a él, porque eso es casi todo lo que hace un niño cuando está con su padre. Luego me di cuenta que no solo era mi papá el único que se sesibilizaba con el juego, era toda la tribuna, que no despegaba la mirada del balón como si estuvieran viendo un cometa o un cuerpo masizo de oro. Los hinchas de la Liga, por ejemplo, veían horrorizados como en el 95 Alfaro Moreno encaraba 5 veces seguidas al arquero con ruta segura de gol, entre otras cosas, porque las redes ya le habían guiñado el ojo cuando el tipo saltó a la cancha. El día en que sentí ese horror, ese vertigo angustioso fue cuando me vi perdido, ya era un hincha fanático más de un club y un mendigo del fútbol. Desde esos tiempos, cualquier niño de mi edad que me dijera que no le gustaba el fútbol era, para mi, un personaje dudoso, no se podía confiar en él. Y hay que admitirlo, en estas zonas del mundo encontrar un niño que no le guste el fútbol es para angustiarse por la buena puntería. En el Ecuador, todos saben quien es Antonio Valencia, probablemente la mayoría sabe donde juega y su posición. Los niños también, los niños sobretodo. En este país los superhéroes son unos morenos de humilde procedencia que salen todos los domingos disfrazados de país o de pueblo o de ciudad, enmascarados en su sudor. Los poderes de estos personajes son más humildes que los de superman, por supuesto, pero no menos fantásticos. Una gambeta, un galletazo, un sablazo clavado en la esquina, una atajada, son los poderes que sacan nuestros superhéroes criollos los domingos en las canchas de fútbol. En los templos como el Atahualpa o en las canchitas de liga barrial. Claro, como sucede con todos los superhéroes: todos queremos ser uno.
Hace poco tuve la suerte de visitar un barrio periférico de Guayaquil donde (falta decirlo?) el fútbol era la religión dominante. Los taximotos adornados con escudos de los equipos preferidos de la ciudad, el estadio del barrio repleto de jugadores y aficionados, la calles cerradas por el duelo a muerte que se sostenía entre un grupo de amigos que habían encontrado cuatro piedras y un balón, la televisión prendida en un partido de fútbol profesional. No es solo un juego, por ahora es un día el fútbol, al menos un día en la semana. La pobreza, por suerte, en Pascuales descansa los días domingos y ahí aprovechan los jugadores de la vida para reivindicarse en el terreno de juego. El fútbol es ese día, se disputa la popularidad con el altísimo, aunque a veces ambos se confunden una jugada, a veces, creen por allá, que es el mismo. En fin, la importancia del fútbol no solamente radica en la capacidad que tiene de encendernos un sentimiento nacional que no florece en el día a día. De eso ya se a hablado demasiado, y me parece simplista casarse con ese argumento. A mi me parece que el partido de mañana, por ejemplo, no es solo un asunto de estado, mejor dicho de país, creo que se escapa de eso por varias razones. No creo que sería lo mismo si mañana jugara la selección de basquet femenino del Ecuador (sin discriminar, por supuesto a las respetables y admirables señoritas). Preguntémonos por qué. Personalmente tengo ideas pero que solo pueden ser activadas a partir de la interacción con otras opiniones. Opine.

sábado, 30 de mayo de 2009

Los fulanos nunca mueren


En las noticias lo acusaron de haber muerto a sus 88 años. En su funeral instalaron una alfombra roja como si en cualquier momento fuera a llegar Brad Pitt. Lo esperaron hasta altas horas pero no llegó. Le tallaron un sarcófago exageradamente grande para su tamaño. Mario Benedetti era un tipo más bien de corta estatura, como pequeño es el país donde nació, a donde dijeron que volvió para morir como si en verdad pudiera morirse ese fulano. Ese fulano que le cantó, sobretodo, a la vida o, mejor dicho, cantó con la vida, subida, como un lorito, en su espalda.
La poesía es un milagro, es como una lluvia que cae lentamente en el desierto. Nos llueve sobre la cara y nos inunda, casi que nos ahoga y luego, cuando se encharca en las calles, o en la tierra, y se convierte en un estanque personal, nos da la oportunidad de enfrentarnos a nuestro reflejo, de mirarnos bien adentro, de tratar de pescar el alma que nada despavorida. Benedetti bajó en el aguacero, o mejor aún, es ese aguacero, que nos rocía la cara de las bondades del cielo, de su tacto de nube, de alto y suave viento. Yo nunca lo vi en persona, ni siquiera estuve cerca de hacerlo, tampoco sé como hubiera reaccionado, qué le hubiera dicho si hubiera tenido esa oportunidad. Hubiera bastado con sentirme rodeado de su voz, de su voz ronca y acogedora, tocada por los dioses, cantor de la divinidad, que es humanidad, que somos nosotros los fulanos, menganas y hasta los canallas de los zutanos.
Cuando Pablo Neruda escribió su Canto General estábamos seguros de que la gente de nuestra Patria Grande por fin tenía su himno. Pablo Neruda fue capaz de traducir en verso lo que nuestra gente gritaba en silencio. Neruda canta el himno de los perdedores de la historia, Benedetti, canta con nosotros. Nosotros que somos humildes perdedores, pero al mismo tiempo, déspotas ganadores, que podemos simultáneamente ser hambrientos lectores de poesía y consumidores obesos de nuevas ediciones. Aquí en esta tierra, donde estamos desmembrados dentro de nosotros mismos, es a donde baja el gran Benedetti, baja porque sabe que no escribe para la gente, sino con la gente, para los otros fulanos que somos nosotros.
No pretendo con este texto (el primero de este espacio) resumir la vida de Benedetti, o hacer algo así como una reseña, de su vida, obra y de su supuesta muerte. Le pretensión de este cuerpo “textuado” es la de ejecutar un humilde homenaje desde este espacio que pretende por lo menos reunir a los amigos dispersos en la ciudad o en el mundo. Muchas veces nuestras conversaciones contaron con la presencia del poeta, como que nos iba susurrando, hecho el gil, muchos de sus versos. Algunos de esos se han convertido, con el tiempo, en conjuro de batalla, en grito de rabia o en simple palabra de amor. Los versos de Benedetti se instalaron ya en mi sangre, están encendidos en mi boca. A dónde no me ha acompañado un verso de Benedetti, cuántas veces comparé mi vida con la de sus cuentos o su tregua y hoy, en este humilde texto, me sigue acompañando porque sigue vivo.
Los fulanos nunca mueren porque son memoria en sí misma. No mueren porque viven en la piel de la utopía, son la piel de la utopía. El tiempo, para atrás y para adelante, son uno solo, quién me puede convencer a mí de que Benedetti murió algún domingo del 2009. Quien lo dijo, no lo sé, y creo que en el fondo no me importa. Lo importante acá es hablar de la vida de Benedetti, que es su poesía (los otros géneros también por supuesto) y por eso propongo que aquellos que tengan que decir algo al respecto o recordar un verso, una frase, una entrevista, un video, etc., utilicen este lugar para hacerlo. Hay una idea por ahí en que sería lindo abrir un lugar público para leer en voz alta algunos de sus poemas o sus cuentos, sería interesante saber que se opina al respecto.

Vuelven las temibles "Locas"

Hace 5 años, más o menos, los de la leva 86 de "Las Locas" acabábamos de graduarnos del colegio y nos disponíamos a enfrentar una vida distinta, que nos iba a arrojar a cada quien en distintos caminos. Por eso surgió la necesidad de encontrar un espacio en donde podamos encontrarnos y resultado de eso se inauguró una página web que todavía sobrevive en este interminable mundo electrónico. El Ricardo fue quien, haciendo gala de sus conocimientos en el campo de la informática, construyó este recurso electrónico en donde se publicó un génesis de las llamadas "Locas" y otros pocos relatos acerca de la historia oficial de los panas. Hay que decir que el proyecto era prometedor, porque incluía varias categorías que aglomeraban los intereses de la mayoría de nosotros. Había un espacio dedicado a la literatura y otro a la música y en el futuro se podrían haber abierto otros espacios para otros temas. Existía un pasadizo especialmente interesante en nuestra página web: el personaje de la semana. En esta propuesta se escogía un miembro de "las locas" y se le dedicaba una corta biografía desde un ángulo muy particular. El primer personaje de la semana fue el querido compañero Tucho ahí en Julio de 2004. También el Tucho es el vigente personaje de la semana más larga de la historia pues nuestro arquitecto virtual, el encargado del relato, del diseño, de la página en general, decidió otorgarle ese título de manera vitalicia. Por falta de tiempo o de recursos, o por falta de otras cosas, nadie le (cuando digo nadie me refiero al Ricardo, si a vos Ridosh) dedicó el tiempo a la página a la cual revisé hoy día y la descubrí detrás de polvo y de telarañas. Claro que la magia de la nostalgia estaba intacta, la carta del Rido es más pertinente que nunca y algunas fotos, como si se estuviera viendo una reliquia, desgarran la memoria, te llenan de luces la memoria. Han pasado los años, algunos me pasaron por encima o por abajo, otros me atravesaron por el pecho, fui varios, y varios me fueron en mi. Sufrí, me reí me enamoré, me fui a la B y di la vuelta en el Maracaná. Me pasaron un millon de cosas y seguro que a todos ustedes también les pasó, de varias de ellas fui privilegiado testigo, de otras un receptor remoto, y de otras tantas nada. Hoy, como dije, revisaba esa página web y caí en la cuenta de que es necesario crear siempre espacios donde pueda germinar y crecer un colectivo. Creo profundamente que esta forma de vida activa lo mejor que tenemos como individuos, porque solo dentro de una comunidad podemos trivializar las jerarquías y relacionarnos de maneras más verdaderas. A mi me nace esto en parte por esa antigua inspiración de jóvenes y también por una necesidad humana de expresarme. Creo que es indispensable mantener viva la comunidad que somos, todos aquellos a los que considero mis hermanos, de modo que me puse a pensar una manera en que podíamos tener un espacio común, una trinchera como diría el Rido, donde expongamos nuestras posiciones o ideas al respecto de asuntos que nos parezcan importantes. Exponerlos de una manera informal sin ataduras de forma, pero no por eso sin compromiso, al contrario, creo que es fundamental que dentro de un espacio común es necesario tirar ideas o reflexiones de manera seria. Tampoco tengo la voluntad de proponer un temario con items aceptables para el blog, sino, por el contrario, que el piso esté abierto para que consternaciones individuales puedan ventilarse aunque sea de a dos. Esta puede ser también una buena manera de ir consolidando algunas iniciativas que se han tenido en el pasado pero que por vagancia o algún otro impedimento ni siquiera tuvieron derecho a nacer. Por ejemplo yo le decía al Gato y al Peich que sería una buena idea hacer algo como un musical, porque creía que había escrito algo que se adaptaba a eso. Yo mismo cometí el error de quitarle continuidad al tema en mi cabeza, por suerte hoy, como un desempleado más de la república, puedo darle más tiempo a estas empresas.
Esta es mi propuesta compañeros, a estos 2800 metros que no son solo de locura, sino a veces de frío o de soledad y de tristeza, pero también de algarabía, de osadía y de delirios, en que cada quien pueda sentarse y escribir al respecto de algo que le interese contar o simplemente expresar, sacarse los demonios, seguro en mi tendrá un eco, no siempre una respuesta y espero que haya más comprometidos, con más ideas para el lugar, pues yo soy un tipo con poca imaginación y ando como en una cuerda floja cada vez que navego en estos territorios virtuales.
Por último quería inaugurar esta iniciativa subiendo un texto que he estado trabajando esta semana al respecto de Benedetti. Debo confesar que la muerte del compañero poeta tuvo una gran repercusión en mi, como seguro la tuvo en todos aquellos que alguna vez experimentaron y vivieron en su poesía o en sus relatos. La confesión iba por el lado de que esa necesidad de escribir, de decir lo que sentía, parecía no encontrar su sitio de descanso, o mejor dicho su salida hacia el universo, guardadas en el disco duro de la computadora son palabras sin sombra. En todo caso yo quería hacer esta propuesta de entrada de algún modo tratando de motivar a alguno que vivió cobijado con los versos del poeta mayor para que diga lo que tenga que decir de este triste acontecimiento. Esto no quiere decir que ningún otro texto de otro tema no va a ser incluido o va a ser despreciado, por el contrario existen varios asuntos que necesitan ser addreseados (perdon no se me ocurre otra palabra) como la vaina de la gripe porcina o la siempre divertida y novedosa situación política de nuestro país. Espero, de cualquier modo, que se suban a esta propuesta y que participemos todos activamente de algo así como una comunidad. La revolución debe empezar por algún lado, no?